Vestidos de invitada rojos: la tendencia continúa en 2024
Que el rojo ha sido el protagonista del otoño/invierno 2023/2024 es una afirmación más que corroborada. Si en los meses de octubre y noviembre las prendas de punto comenzaban a teñirse del color de la pasión, con la llegada de la Navidad terminó por invadirlo todo. Desde medias y calcetines a zapatos y bolsos pasando, por supuesto, por jerséis y vestidos; nadie ha podido resistirse a vestir de rojo durante las fiestas.
Pero quien no haya encontrado la ocasión (o el look) idónea para hacerlo, tiene una segunda oportunidad. Y es que, pese a ser una tonalidad muy asociada a la época invernal, parece que su reinado continuará en primavera. Especialmente, en estilismos pensados para bodas y grandes eventos. Porque si algo caracteriza al Pantone más apasionado es su carácter sofisticado y su capacidad para elevar cualquier prenda. Algo que han terminado por confirmar las propuestas de pasarela a través de las colecciones para la próxima primavera.
La gran apuesta de las pasarelas para la primavera/verano 2024
La fórmula de las colecciones de otoño/invierno ha vuelto a repetirse en las propuestas estivales. Grandes firmas y diseñadores siguen apostando por el rojo para looks sofisticados y lo hacen innovando en formas, estilos y tejidos.
Destacan las prendas que apuestan por la elegancia clásica, a través de piezas estructuradas y tejidos con movimiento, como los vestidos que juegan con los volúmenes y las aperturas de Alexander McQueen, o los diseños minimalistas –aunque extremadamente especiales– de Valentino. Prendas que confirman que un color favorecedor y con carácter no necesita aderezos.
Aunque no todo es sencillez y minimalismo. Los más asiduos a arriesgar apuestan por piezas confeccionadas con lentejuelas y encajes, vestidos mini, combinaciones de tejidos y siluetas, a priori, ajenas al protocolo nupcial.
Entre ellos se encuentran prendas como el minivestido vibrante con detalles en encaje negro de Gucci, el vestido maxi de lentejuelas en tono burdeos de Balenciaga –una apuesta interesante para las madrinas de 2024–, el naked dress bordado de Alexander McQueen o el diseño palabra de honor y plagado de apliques de Schiaparelli que defendió Kendall Jenner sobre la pasarela.
Si algo queda claro, haciendo un análisis de todas las propuestas, es los vestidos de invitada rojos serán la tendencia más aclamada de la temporada. Y que este es un color capaz de adaptarse a cualquier estilo y que su reinado no ha hecho más que empezar.
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