Belleza Novias

Cómo cuidar tu rostro un mes antes de la boda si tienes la piel grasa

Dos dermatólogos comparten sus consejos sobre el cuidado de este tipo de pieles
Cómo cuidar tu rostro un mes antes de la boda si tienes la piel grasa
Elena Olay

¿Qué novia no sueña con estar radiante el día de su boda? ¿Con el vestido perfecto, un maquillaje impecable, el peinado ideal y una piel de película? No, en serio. ¿Acaso alguien no? Generalmente, son muchos los esfuerzos (de tiempo y de dinero, para qué mentir) que las futuras novias dedican a esta misión como para que algo tan tonto como no prestar atención a la rutina de cuidado facial pueda echarlo todo a perder. Y esto afecta a todos los tipos de piel, evidentemente, pero además, aquellas que tengáis la piel grasa tendréis más probabilidades de que un brote repentino de acné decida hacer una aparición estelar en el día B. Qué sorpresa tan agradable, ¿verdad?

Pero que no cunda el pánico. Por mucho que tengamos tendencia acneica, es posible mantener los granitos, brillos y poros bajo control con algo tan sencillo como seguir (a rajatabla, eso sí) una buena rutina de cuidados adaptados a las necesidades específicas de nuestro caso. Según la Doctora Aurora Garre, Medical Marketing Manager en ISDIN, existen dos pasos absolutamente imprescindibles: “limpieza y fotoprotección específicas. Es decir, utilizando productos formulados especialmente para personas con acné o que estén avalados por estudios que demuestren que no son comedogénicos”. Para la dermatóloga, ambos ocuparían un primer nivel de prioridad “porque una piel grasa tiene que tener, sobre todo, un cuidado de higiene diario. Lo importante aquí es la constancia”, declara. Y, además, explica que añade la fotoprotección porque “los granitos inflamatorios pueden dejar marcas y estas se agravan más si se exponen al sol”. Dentro del porfolio de productos de Isdin, la doctora recomienda el Fotoprotector Isdin Fusion Water SPF 50+ 5 Star Daily Protection, debido a su textura ultraligera, ideal para este tipo de pieles.

Cortesía de la firma

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Por su parte, el Doctor José Luis López Estebaranz, Director Médico de la Clínica DermoMedic (Madrid) y colaborador de Bioderma, aconseja que el limpiador que se utilice “no sea agresivo con la piel, que tenga un pH equilibrado y que se use de una o dos veces al día”. A continuación, él recomienda aplicar una crema hidratante (de nuevo, no comedogénica) y acompañarla de un antioxidante (si tenemos también tendencia a las manchas) o de un sebo-regulador (si, sobre todo, tenemos tendencia al acné). Este último tipo de productos son la clave para mantener a raya los granitos y puntos negros, al igual que los queratolíticos con algún retinoide, el ácido ferúlico o el ácido glicólico a bajas concentraciones, según el doctor.

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La dermatóloga Aurora Garre matiza, además, que dependiendo del estado del acné será interesante utilizar un tipo de ingredientes u otro. En este sentido, recomienda la zincamida cuando se busque un efecto matificante; el ácido láctico y la arginina por su acción comedolítica que desobstruye los poros; la niacinamida, por su acción antiinflamatoria; los probióticos, para restablecer la flora de la piel e impedir el crecimiento del Propionibacterium acnes; el ácido glicólico, por su acción exfoliante; y el ácido salicílico, por su acción comedolítica y queratolítica.

Por otro lado, en lo que se refiere a ingredientes a evitar, la Doctora Garre considera importante “aclarar este asunto: existen múltiples informaciones en internet sobre listados de ingredientes cosméticos a evitar en personas con acné, pero hay que tener en cuenta que su capacidad de producir comedones depende también de su concentración y la suma de ellos. Un usuario no puede llegar a saber estos datos y, por tanto, estas listas les confunden”, explica. Opina que del mismo modo ocurre con las etiquetas de oil free, cuya interpretación exacta al final varía entre diferentes laboratorios. ¿Cómo orientarnos, entonces? Según la doctora, actualmente la única reivindicación que asegura que un producto sea apto para pieles mixtas y grasas es la etiqueta de 'no comedogénico', que realmente significa “que el producto se ha testado en personas con pieles mixtas y grasas y, después de un uso en condiciones normales durante cuatro semanas, no han aparecido más comedones”, argumenta.

Además de adaptar la rutina de belleza, siempre es efectivo combinar su eficacia con la de tratamientos específicos en cabina. Para las pieles con tendencia acneica, el Doctor Estebaranz recomienda mascarillas, peelings o tratamientos superficiales con alfahidroxiácidos, así como terapias con luz que inhiben la secreción excesiva de las glándulas sebáceas. Para quienes busquen un producto bastante concentrado para utilizar también en casa de manera diaria, Bioderma acaba de presentar el nuevo Sébium Night Peel, un peeling dermatológico con un 15% de ácido glicólico que reduce las imperfecciones y marcas de acné, alisa la piel y controla los brillos

Sebium Night Peel de BiodermaCortesía de la firma

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Por supuesto, ante la duda y para garantizar el mejor resultado posible, ambos doctores recomiendan acudir a un especialista para que sea él quien realice un diagnóstico y su consiguiente asesoramiento. Y, ante todo, comparten la ya consabida recomendación de no tocarse los granitos en caso de que aparezcan (aunque queden pocos días para la boda; en serio, lamentarás no haberte contenido). Tal y como explica el doctor, “existen sustancias queratolíticas comedolíticas que se pueden aplicar dos veces al día y que aceleran su eliminación”, como la famosa loción secante de Mario Badescu. Y, en caso de que contemplar al nuevo invitado sea superior a tus fuerzas y dispare tus niveles de ansiedad, “también podrían eliminarse con una extracción manual en cabina”. Pero nunca, NUNCA, deberías manipular las lesiones por tu cuenta ya que, probablemente, termines dejando una marca más difícil de cubrir que el propio grano. Según Estebaranz, “una lesión inflamatoria manipulada de forma inadecuada (la tuya, sí) puede provocar que rompas la cápsula y crees más inflamación en la zona colindante”. ¿Verdad que no te gusta como suena?

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Por último, el doctor hace un llamamiento a no cambiar de rutinas o de productos con tan poca antelación a la boda. Nunca sabemos cómo puede reaccionar nuestra piel a diferentes combinaciones de productos, por lo que lo ideal es tener establecida la rutina desde varios meses antes del enlace. Y cuidado con el estrés. En palabras de Estebaranz, “puede hacer que se segregue más grasa de la habitual pero, en ese caso, no hay que aumentar el exceso de lavado porque puede tener un efecto rebote”. Mejor consagrarse a las bondades de una infusión relajante.