La tendencia de las novias minimalistas y sin maquillaje

Momentos antes de que Trinity Mouzon Wofford pasara por el altar el pasado mes de septiembre, la empresaria tomó prestado un tubo de pintalabios Glossier del bolso de su dama de honor. Ese fue el único cosmético que combinó con su vestido vintage de encaje; por lo demás, iba con el rostro desnudo. La cofundadora de la marca de bienestar Golde no suele llevar mucho maquillaje (en cambio, se toma "muy en serio" el cuidado de la piel) y quería mantener la sencillez. Tras ver las fotos en Internet, muchos elogiaron su instinto minimalista: "Me quedé muy impresionada por la respuesta", dice Mouzon Wofford. "Mucha gente me dijo que era algo 'refrescante' en un maremágnum de bodas meticulosamente orquestadas".

Meredith Heuer

A medida que las ceremonias modernas van sumando uniones en ayuntamientos y reuniones junto a la playa, los expertos en belleza están centrando su atención en looks más sencillos, ya sea a través de productos centrados en la luminosidad de la piel, la constancia de los tratamientos (el facial de Mario Badescu es uno de los favoritos de las que saben de esto) o técnicas sencillas como el truco del underpainting, popular en TikTok (una actualización estricta del empalagoso contouring). Últimamente, no maquillarse (o maquillarse poco) está de moda.

"Hemos pasado por una pequeña fase en la que la gente utilizaba mucho maquillaje y corrector, pero estamos saliendo de ella. Ahora las mujeres están empezando a conocer su propia piel", dice Erin Green, maquilladora que ha trabajado en importantes editoriales de moda y para grandes marcas de belleza (como Glossier, el creador de la barra de labios que cogió Mouzon Wofford). Green incluso optó por un maquillaje minimalista el día de su boda en el Hackney Town Hall de Londres: "Para mí era importante sentir que no me alejaba demasiado de mi look diario", afirma.

De hecho, muchas novias se plantean renunciar a los cosméticos muy cubrientes cuando suben las temperaturas. Algo que Green ya había observado, aunque no suele maquillar a novias, a no ser que se trate de un favor para una amiga íntima: "Una amiga se casaba en Tulum en pleno verano, así que optamos por prescindir por completo de la base de maquillaje", explica. “En climas más cálidos, lo mejor es reducir la base lo máximo posible; de lo contrario estarás contrarrestando la humedad. Un buen tratamiento facial unos días antes y una buena preparación la mañana del día de la boda pueden crear el efecto de una base de maquillaje transparente”. Green señala el Instagram de Sofie Pavitt como "un gran ejemplo a seguir" para el tratamiento de la piel.

"En Brasil, con el calor, la gente tiende a no maquillarse mucho para las bodas", dice Marianne Fonseca, fundadora de Gente Beauty. Frecuentemente, las parejas “se casan en la playa y, como su cultura está muy centrada en el cuidado del cuerpo, la novia le presta más atención”. Señala que los masajes de drenaje linfático, muy populares en Brasil, son "sin duda" un básico en el menú matutino de las novias.

Los dermatólogos recomiendan una rutina que prepare la piel para su momento de gloria mucho antes de la ceremonia: "Las novias que quieren lucir una piel radiante y luminosa optan por tratamientos estéticos en los meses previos a la boda", afirma la doctora Quenby Erickson, dermatóloga colegiada con sede en Chicago. Señala que un tratamiento popular, que suele realizarse tres meses antes de la boda, es la fototerapia como BBL Hero® (siglas de BroadBand Light, luz de banda ancha) "para borrar el daño solar, las manchas marrones y los capilares rotos". La doctora Doris Day, dermatóloga de Manhattan, secunda esta sugerencia y señala que la tecnología de ultrasonidos puede tardar unos seis meses en producir un sutil efecto lifting y un aumento de colágeno saludable.

También existe un vínculo entre el cuidado de la piel y el estilo de vida: "Antes del gran día fui rotando mis productos favoritos", dice Mouzon Wofford. Entre ellos, dos grandes éxitos: el aceite Supernal Cosmic Glow Oil y el limpiador Lesse Ritual Cleanser. "También tuve la suerte de que, casándome cinco semanas después del parto, aún conservaba la luminosidad del embarazo", añade.

Mónica Sordo, fundadora y directora creativa de la línea de alta joyería Sordo, también señala los cambios que la pandemia ha acelerado en los hábitos de belleza: "Comer bien, tomar los suplementos adecuados, hacer ejercicio, tener una rutina de belleza, dedicar tiempo a uno mismo para meditar... Todo esto se refleja en tu actitud, en tus ojos, en tu sonrisa y, en última instancia, en tu piel", afirma. El mundo de la moda ya ha se ha adherido a este movimiento (lo que suele indicar lo que está por venir en el mundo nupcial). La propia Sordo lució un rostro completamente desnudo el día de su boda, que consistió en una ceremonia civil y un brunch en el Soho House de Miami. La sorpresa "de última hora" para su familia, que se había reunido por Navidad unos años antes, requirió poco más que champán, una cámara Polaroid y toda una vida cuidando su piel.

"Soy poco exigente con el maquillaje, pero no con mi rutina de belleza", dice Sordo entre risas. Señala que le gustan los tratamientos faciales y de plasma, así como algunos de los típicos trucos de nuestras abuelas: “Si quiero dar un poco de color a mis mejillas, las pellizco suavemente mientras me aplico el tratamiento”. También se ha dado cuenta de que últimamente sus amigas están optando por tonos más claros de maquillaje el día de su boda. Por supuesto, “es difícil ir sin maquillaje para las fotos, pero en las bodas más recientes de mis amigas el maquillaje era tan natural que realzaba sus rasgos. Hasta hace poco, las mujeres (yo incluida) siempre queríamos ocultar las 'imperfecciones', pero ahora confiamos más en nuestra belleza natural”.

Mouzon Wofford también defiende esta actitud: "Yo animaría a la gente a que se viera como realmente es", dice dirigiéndose a las novias que están valorando su propia estrategia de belleza. "Si les gusta maquillarse y divertirse con su look, no tienen por qué avergonzarse de ello. A las minimalistas del maquillaje les diría que, al fin y al cabo, un look que requiera poco mantenimiento te dará más tiempo para disfrutar del gran día, ¿y quién diría que no a eso?

Este artículo se publicó originalmente en Vogue.com. Traducción y adaptación: Carmen Cocina.

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